martes, 13 de febrero de 2024

Sobre hebraísmos.

Los hebraísmos son expresiones o construcciones lingüísticas que reflejan el uso del hebreo en la lengua griega del Nuevo Testamento o en traducciones de textos hebreos al griego. Estos elementos reflejan características únicas del hebreo, su sintaxis, semántica o idiomática, que no se encuentran comúnmente en el griego.

Algunos ejemplos de hebraísmos incluyen:

1. Genitivo de origen. En hebreo, la posesión se indica a menudo mediante una construcción genitiva que expresa el origen o la relación entre dos sustantivos. Esta construcción también se encuentra en el griego del Nuevo Testamento, aunque es menos común que en hebreo. Aquí hay algunos ejemplos destacados:

A. Reino de Dios. Esta expresión aparece frecuentemente en los evangelios y las cartas de Pablo. En griego, se expresa como “basileia tou theou” (βασιλεία τοῦ θεοῦ), donde “basileia” es “reino” y “tou theou” es el genitivo de “Dios”. En hebreo, la expresión correspondiente sería “malkut haElohim”.

B. Hijo de Dios. Esta es otra expresión común en el Nuevo Testamento para referirse a Jesucristo para indicar su naturaleza divina. En griego, se expresa como “huios tou theou” (υἱὸς τοῦ θεοῦ), donde “huios” es “hijo” y “tou theou” es el genitivo de “Dios”. En hebreo, podría expresarse como “ben Elohim”.

C. Palabra de Dios. Esta expresión se utiliza para referirse a la Palabra de Dios, ya sea como una referencia a las Escrituras. En griego, se expresa como “logos tou theou” (λόγος τοῦ θεοῦ), donde “logos” es “palabra” y “tou theou” es el genitivo de “Dios”. En hebreo, podría expresarse como “davar Elohim”.

D. Reino de los cielos. En el Evangelio de Mateo, especialmente, se utiliza la expresión “Reino de los cielos” como una referencia al Reino de Dios. En griego, se expresa como “basileia ton ouranon” (βασιλεία τῶν οὐρανῶν), donde “basileia” es “reino” y “ton ouranon” es el genitivo plural de “cielo”. En hebreo, podría expresarse como “malkut shamayim”.

Estos son solo algunos ejemplos destacados, pero hay otros ejemplos de genitivo de origen en el Nuevo Testamento que reflejan estructuras hebreas y demuestran la influencia del hebreo en el griego del Nuevo Testamento.

2. Uso del artículo definido. El hebreo a menudo omite el artículo definido cuando el contexto es claro, mientras que el griego tiende a incluirlo. Por lo tanto, algunas expresiones hebreas que no usan el artículo definido pueden aparecer en griego con el artículo, lo que indica su origen hebraico.

A. Juan el Bautista. En griego, se expresa como “Ioannes ho baptistes” (Ἰωάννης ὁ βαπτιστής), donde “ho” es el artículo definido “el”. Sin embargo, en hebreo, esta expresión podría ser simplemente “Yohanan haMikveh” (יוֹחָנָן הַמִּקְוֶה), donde no se incluye el artículo definido.

B. Reino de los cielos: Aunque mencioné esta expresión anteriormente, es importante destacarla aquí nuevamente. En el Evangelio de Mateo, en lugar de usar el artículo definido “el” como en “Reino de Dios”, se utiliza “Reino de los cielos” para evitar pronunciar directamente el nombre de Dios, como se acostumbraba en el judaísmo. En griego, se expresa como “basileia ton ouranon” (βασιλεία τῶν οὐρανῶν), donde “ton” es el artículo definido plural “los”, pero en hebreo podría ser “malkut shamayim” (מלכות שמים), sin el artículo definido.

C. Hijo del hombre. Esta expresión, utilizada por Jesús para referirse a sí mismo en los evangelios sinópticos, es traducida del hebreo “ben Adam” (בן־אדם). Aunque en griego se incluye el artículo definido “el”, en hebreo no se necesitaría. En griego, se expresa como “ho huios tou anthropou” (ὁ υἱὸς τοῦ ἀνθρώπου), pero en hebreo sería simplemente “ben adam” (בן־אדם).

Estos son solo algunos ejemplos destacados en los que se puede observar la influencia del hebreo en el Nuevo Testamento, especialmente en la omisión del artículo definido que es más común en griego.

3. Doble negación. En hebreo, es común utilizar una negación doble para enfatizar una negación. Esta característica se puede encontrar en algunos pasajes griegos que reflejan influencias hebreas. Aquí hay algunos ejemplos donde se puede observar esta influencia:

A. Mateo 5:18 (NVI): En este pasaje, Jesús dice: “En verdad les digo que no desaparecerá ni una letra, ni una tilde de la ley hasta que todo se haya cumplido”. La doble negación se refleja en la frase “no desaparecerá ni una letra, ni una tilde”, donde en griego se usa la frase “ou me” (οὐ μή) para negar tanto “desaparecerá” como “ni una letra, ni una tilde”.

B. Mateo 18:18 (NVI): Aquí Jesús dice: “Les aseguro que todo lo que aten en la tierra quedará atado en el cielo, y todo lo que desaten en la tierra quedará desatado en el cielo”. Nuevamente, la doble negación se observa en la frase “no desaten”, donde en griego se usa “ou me” (οὐ μή) para negar tanto “desaten” como “todo lo que desaten en la tierra”.

C. Juan 6:35 (NVI): En este pasaje, Jesús declara: “Yo soy el pan de vida. El que a mí viene nunca pasará hambre, y el que en mí cree nunca más volverá a tener sed”. La doble negación se refleja en la frase “nunca más volverá a tener sed”, donde en griego se usa “ou me” (οὐ μή) para negar tanto “volverá” como “tener sed”.

Estos son solo algunos ejemplos donde se puede observar la influencia de la doble negación hebrea en las traducciones griegas del Nuevo Testamento. Esta estructura lingüística agrega énfasis y fuerza a la negación en el discurso, y es importante para comprender el significado y la intención original de los pasajes.

4. Expresiones idiomáticas. El hebreo tiene muchas expresiones idiomáticas que no tienen una traducción literal en otros idiomas. Estas expresiones pueden aparecer en el griego del Nuevo Testamento y pueden ser difíciles de entender sin una comprensión del idioma y la cultura hebreos.

A. “Ojo por ojo, diente por diente”: Esta expresión aparece en Mateo 5:38 y refleja una enseñanza del Antiguo Testamento (cf. Éxodo 21:24, Levítico 24:20, Deuteronomio 19:21). En hebreo, se expresa como “ayin tachat ayin, shen tachat shen” (עַיִן תַּחַת עַיִן, שֵׁן תַּחַת שֵׁן). En el Nuevo Testamento, Jesús utiliza esta expresión para enseñar sobre el principio de justicia y la importancia del perdón.

B. “Hijo de David”: Esta expresión se utiliza para referirse a Jesús como descendiente de David, lo que es una afirmación de su identidad mesiánica. En hebreo, se expresa como “ben David” (בֶּן־דָּוִד). Aparece varias veces en el Nuevo Testamento, como en Mateo 1:1, 9:27 y 15:22, entre otros.

C. “¡Eloi, Eloi, ¿lama sabactani?”: Estas palabras son pronunciadas por Jesús en la cruz y son una transliteración del arameo al griego, pero la frase “lama sabactani” tiene una raíz hebrea. La expresión refleja un versículo del Salmo 22:1 en hebreo: “Eli, Eli, lamah azavtani” (אֵלִי אֵלִי, לָמָה עֲזַבְתָּנִי), que significa “Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?”.

D. “¡Bar-Jonas!”: Jesús llama a Simón Pedro “Simón, hijo de Jonás” en Mateo 16:17, que en hebreo sería “Shimon ben Yonah” (שִׁמְעוֹן בֶּן־יוֹנָה). Este tipo de expresión refleja una forma hebrea común de referirse a alguien por el nombre de su padre.

E. “Nazaré”: La expresión “Jesús de Nazaret” (en griego, “Iesous ho Nazoraios”) es una transliteración del hebreo “Yeshua haNotzri” (יֵשׁוּעַ הַנּוֹצְרִי), donde “Notzri” significa “de Nazaret”.

Estos son solo algunos ejemplos de expresiones idiomáticas hebreas que se encuentran en el Nuevo Testamento, destacando la influencia del hebreo en el lenguaje y la cultura de la época.

Los hebraísmos son importantes para la interpretación bíblica porque pueden influir en el significado o la comprensión de ciertos pasajes. Reconocer y comprender estos elementos lingüísticos puede ayudar a los estudiosos a interpretar correctamente el texto bíblico y a captar mejor la intención original del autor.

Sobre hebraísmos.

Los hebraísmos son expresiones o construcciones lingüísticas que reflejan el uso del hebreo en la lengua griega del Nuevo Testamento o en tr...